Por: El Mitote
Chihuahua, Chih., a 7 de noviembre del 2023.- Luego de que el exdirigente del PRI, Fermín Ordoñez Arana se reincorporara al tricolor, tras desertar en el 2019 para no solo “coquetear” con Movimiento Ciudadano, sino con Morena, el coordinador del GPPMorena, Cuauhtémoc Estrada Sotelo refirió que “la cabra siempre tira al monte”.
En efecto, luego de que durante la gestión de Omar Bazán Flores al frente del tricolor, no solo fue Fermín Ordoñez quien tomó la decisión de dejar el partido, sino varios personajes de la política abandonaron el barco, esto precisamente en el 2019.
Y es que el día de ayer el dirigente estatal del PRI, Alejandro Domínguez dio la bienvenida a Fermín Ordoñez y Martín Enriquez, asegurando que no solamente serían estos dos cuadros quienes regresarían al tricolor, que habían muchos más personajes con los cuales se estaba teniendo un acercamiento.
El pretexto en ese entonces por parte de los “priistas” de irse del tricolor, en base estaba fundamentado en el liderazgo que acababa de asumir Omar Bazán Flores, a quien muchos señalan de haber dividido al partido ó incluso haber corrido a la militancia.
No obstante, la deserción de la militancia ocurrió en medio de los escandalos de corrupción por desvió de recursos del erario hacia las campañas políticas dentro de la operación “Safiro” donde estados de la república como: Chihuahua, Durango, Sonora, Colima, Estado de México, el Congreso de Morelos y la delegación Milpa Alta de la Ciudad de México, desviaron más de 650 millones de pesos.
Los actos de corrupción como los antes descritos de indole nacional, y en el ámbito local el escandalo del Banco Unión Progreso y demás señalamientos que quedaron plasmados en la Operación Justicia para Chihuahua, fueron parte de ese desmoronamiento del tricolor en Chihuahua.
Y el temor fundado que el exgobernador Javier Corral Jurado encabezó a través de la Operación Justicia para Chihuahua contra funcionarios señalados de enriquecimiento ilicido quienes fueron investigados y a quienes se les imputaron diversos delitos relacionados con corrupción terminaron por espantar a medio mundo, es decir a los priista.
Es ahí donde todos los ingredientes se juntan y comienza la desbandada. Mientras que a nivel nacional, los resultados electorales en las urnas se tradujeron en el 2021, en donde el PRI perdió representación en las dos Cámaras del Congreso y salió derrotado en las 15 elecciones a gubernaturas. El año siguiente, solo retuvo un Gobierno estatal, Durango, de los seis que se elegían, luego retuvo Coahuila, pero perdió su histórico bastión, que es el Estado de México.
Aunado a eso y en base a la “Crónica de una muerte anunciada” por Francisco Labastida y por priistas de la vieja guardia el nombramiento del exgobernador de Campeche frente a la dirigencia nacional, Alejandro Moreno Valle empezó a acumular funciones y amasar poder.
El diagnóstico de algunos priistas apunta que el mayor problema del PRI es la pérdida de poder territorial. Esa merma ha quedado retratado en el mapa político de México, que en los últimos años se ha pintado de guinda y amenaza de nuevo al tricolor y sus aliados con de nuevo dejarlos sin cargos públicos, pero también sin registro.
Pero no todo es para siempre y en esta ocasión el PRI se alía con su medio hermano el PAN, PRD y demás aliados para en un intento de “unidad” poder enfrentarse a Morena y evitar que continue avanzando y termine por destruirlos políticamente hablando.
Es decir, que el reingreso de Fermín Ordoñez y demás personajes que seguramente regresarán como dijo el líder de la bancada guinda en el Congreso del Estado como “la cabra que tira al monte” así muchos priistas regresarán a su casa en este 2024